Buenos malos días



Sé que no estoy preparada para ti.
Me anima saber que entonces tú tampoco lo estás.
(Como lluvia en mis zapatos).


Qué dichoso es aquel que siente que todo le sale mal.
Qué desgraciado aquel que siente que todo le sale bien.
Qué fortuna que sean sólo rachas de buena-mala ventura.
("Pronto le saldrá bien, pronto le saldrá mal".)

Qué terrible es el adiós y que presente quiero tener tu foto para olvidar las otras que agotan mi caminar.

(Qué gracioso que "ame" signifique "lluvia" en japonés).

Qué preciosos considero tu saludo, tu sonrisa y tus ojos.

Qué contenta, qué suelta me siento cuando camino contigo en la noche.

Qué deprimentes son los problemas y qué extraño es ver hacia atrás y nos verlos más.

Ojos rojos ayúdame a sanar, olvida la venganza y muéstrame donde estás.

("¿Quieres ver como es el infierno?").
Sólo permanece constante, quieta y no te atrevas a cambiar.

1 comentario:

EmiliTus dijo...

¿No será que tu eres yo pero en tí?